Por Juan David Collazos
Que rico es soñar y ver cumplir sus sueños realidad. Pues precisamente eso me está pasando en tierras Brasileñas, cumpliendo un sueño visualizado y eso me hace feliz. Conocí de O´Coffee por medio de una
amiga de mi mamá que es miembro de la organización internacional de mujeres en café, y desde ahí se empezó a materializar mi sueño en una realidad. Planear y luchar por tus
sueños exigen de
sacrificios, trasnochas, horas haciendo vueltas, viajando, trabajando,
estudiando, un sinfín de tareas que crecen
cuando buscas un objetivo que es un cumplir un sueño.
Mi felicidad más enorme en esta vida a parte de la familia y
los amigos, es la pasión por el café, algo que se ha adherido a mis venas como si
las bebidas que he consumido se quedaran retenidas y mezclaran mis sensaciones
existenciales que se desarrollan en mi cerebro cuando escucho y leo sobre el
café.
El negocio del
café es tan grande, tanto
así que Brasil es uno de
los mejores países en producción y esto lo hace diferente; pero estar en O´Coffee es más diferente y excepcional. Cada persona que labora tiene una
característica original como la
huella de su mano que marca la diferencia y aporta a construir un mejor O´Coffee del mañana. Para mi es sorprendente conocer una empresa que tiene toda la
cadena de procesamiento del café tan integrada y
excepcional en una sola, y esto me ha despertado la creatividad e innovación en muchas cosas, con respecto a lo que he
visto en otras partes del mundo.
Cuando llegué a Brasil, no sabía a que iba a llegar, pero me sorprendí de la acogida tan sorprendente que tienen las personas y la
humanidad, la misma acogida como si llegase un hijo a la casa de su madre que
lo reciben como nunca. El lugar de residencia para los visitantes es tan mágico y sobre natural que los pensamientos y
soledad se llena de encantos y murmullos de aves y especies que habitan en
ellas, y la acogedora historia que llevan las tierras y construcciones que
fortalece en ella misma. El primer día en que amanecí, escribí algo inspirador que
comparto con ustedes:
“Mi primer amanecer
En un lugar mágico, rodeado de cantos
de loros, gallinas y aves por doquier,
Solo quiero
expresar este canto como la primera vez
Ahora postrado
en un asiento de madera
Veo la belleza
que es el mundo
Y agradezco a
Dios por tenerme en este mágico sueño
Me encuentro en
una hacienda
Donde hospedan
los visitantes
De una finca
imaginable
Rodeado de
planicies y montañas de café
Solo os dejo
este amor tan grande
Como si
volviera a nacer”.
Este lugar lleno de tranquilidad y belleza natural,
ha inspirado mi vida y creo que la vida de los que han pasado por acá, ahora más que nunca agradezco a Dios por las bendiciones dadas y las
muestras de cariño de las personas que
han tocado mi fibra sensible, el afecto.
Aprender en O´Coffee desde los procesos de cultivo por método de irrigación hasta tener que
planear las cosechas y tener los previstos más acordes, hacen de su armonía en el trabajo un espacio diferente y moderno en el negocio del café. En Colombia los procesos del cultivo del
café son por desarrollo
natural, es decir que la misma lluvia provee de agua a los cultivos y no se
requiere de proceso de irrigación por maguera como
sucede en O´coffee. Esto en primera
medida lo hace diferente y exige de mayor precisión para ahorrar costos de producción por saco de café.
Cada ddepartamento de la compañía tiene algo excepcional, tal vez son las
personas, el ambiebte , la pasion por ki que hacen o quizás el aroma de un café.
Mis ideas y perspectivas están cambiando desde que aprendo mas en O'Coffee, y ahora sigo
esperando un nuevo amanecer.